MARTÍN ZÚÑIGA CHÁVEZ






0. Error de capa 8

Imagen cerrada al aire convexo y estanciado no vuelvas por tu moneda en cada balsa ni te acerques más al sol pues derrite. ¿Qué es alguien? Banana banana banana. Tienes un hijo, un adverbio, una casa. ¿Qué podría faltarte? Hay un límite a la cantidad de sensaciones que alguien puede obtener. Las categorías de lo humano y cuanto lo niega están difuminadas. ¿Qué diferencia a una mano del celular? Si los surrealistas pensaban en la velocidad diferida entre el pensamiento y la escritura, esta se ha resuelto. Banana banana banana. Una mosca da con su vuelo contra la telaraña como una flor llamada Marchita. Las tasas de deserción escolar cada vez son mayores, pero aún tenemos libre albedrío. Mira que afuera en los caminos sinestesian sombras y ladran como locos: con hambre y silencio como alguien que podría ser yo dedicado a escarbar en nuestro sobre del mes para tener por dónde dormir. Dejados como somos les dejamos a las máquinas el dejo de salvarnos. ¿Y si tu router deja de funcionar? Banana banana banana. ¿Qué es ser alguien? Un humano. Tengo chips y bites dentro, ¿con esto puedo serlo? Pero por el contrario, amé demasiado. Hasta el punto de lo intacto. Hasta llegar a perderlo. No es como se piensa. Es más parecido a aprender un oficio: granjero o estafador. Ahora me hundo con todo mi cosmos y cableado en las rocas. Ahora aquello es un camino pantanoso y desolado perdido en el monte. Día a día solo tomo del espacio su energía. ¿Hay aquí algún alguien? Banana banana banana. Banana banana banana.


01.

No hay más que promesas sobre la tierra. Promesas sobre la primavera a la vuelta de la esquina. La lluvia al caer en los sembríos quiebra la pavura, rompe las cajas. Un eco de rabia retumba en las paredes del sur. Íbamos a construir muchas máquinas. Promesas contra el horror contra el invierno contra la oscuridad del pasado. Dar vida de este modo es insensible, es reproducir la fragilidad. Íbamos a ser veloces, chongueros, dinámicos, bullangueros, justicieros. La lluvia busca la grieta, el corazón ardiente de la roca para extinguirlo. Sobre la tierra el hambre y el llanto. Arder sarcásticos con los colores de la alegría. Los vehículos contra el aburrimiento se devoran unos a otros con su retumbar insípido. No hay palabras, solo promesas. Íbamos a crecer más que los vecinos. Eran tiempos para invertir, para llegar a ser, no para arder. Íbamos a tener crías robustas e indemnes, y como serpientes de cobre los caminos forrados en asfalto nos unirían. Íbamos a ser fraternos y hermosos. La lluvia remueve la tierra, la hiere, la viola. ¿Para qué las propagandas, los programas de la radio, las películas, las canciones y los bailes de moda? Arder desternillados las cajas que sangran. Entrar a una habitación a oscuras y cerrar los ojos. Al compás de la tierra en el sur se enmohecen los callejones de la noche. Íbamos a refundar la idea de patria, pintar y embanderar cada manzana. El horóscopo dice no se derrumbe en lamentaciones o será así hasta el fin de sus días. ¿Pero y la tos, la sarna, el melanoma? Cartas van de un barrio a otro, cartas con letra redonda escarlata y ordenada. Con pagarés con contratos con promesas. Cada día los sembríos cobran fuerza, ampliamos la frontera agraria dicen los periódicos, las máquinas se atienden solas. Las cajas crían costras y se sellan. Arder melódicos ya no provoca la lluvia, que va y viene todos los veranos. Esta es tierra de cactus. Arder palabras con auténtica vida. Con vida maciza y persistente. No con imitaciones baratas de cables, grasa y lucecitas estroboscópicas todos presos en un retablo andino inmenso. Con campos de música y una idea vulgar e indigna, libre en el viento. No con las sobras y las dulces promesas. Una vasta nación de paja, a las 4:00 de la mañana, vendida en una caja rotulada, arde desde el sur.
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leí en los poscréditos de una peli:
y mientras duermo veo los títulos
me gustan todas sus grandes letras
helvética sin serifa todo cuadrados
les tengo cierta manía. no resumen
nada no dicen nada desconciertan
prometen algo que nunca sueltan
o que lo dan tan fácil: una forma
de decepcionar, pero a la inversa.


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leí mientras despertaba en el periódico oficial de la nación:
solas se oyen las calles no se garantiza la vigencia de los derechos
y libertades constitucionales en su huir brutal de carnicería
por eso cuando grande como consecuencia de la declaratoria
cesa la plena vigencia de los derechos ciudadanos quisiera ser
lector, algo que es por libertad de acción, detención legal,
interrogatorio a detenidos o presos, libertad de locomoción mucho
más civil, honrado y modesto que este miedo con caries
derecho de reunión y manifestación y portación de armas, contenidos
en los artículos citados pero mientras tanto, escarbo días a mano.

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leí en la agenda de mi esposa:
|se puso a escuchar en bucle
|las cartas donde le contabas
|sobre la ormiga y el elefante
|que tan enamorados juegan
|a las escondidas uno tras el
|otro y al revés y no era tuyo
|el chiste pero sí su llena risa
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leí durante las vacaciones en un ensayo burdo:
hay una breve diferencia entre un treno (canto
funeral realizado en ausencia del cadáver) y un
epicedio (canto funeral realizado en presencia
del muerto) YO deseo sus deseos el sabor tan
dulce de reventar cráneos de políticos contra
el pavimento aunque ceder es una forma de la
debilidad. las marchas las manifestaciones son
el primer sí de una geografía nueva los describe
desde su pecho y desde los ojos de ron los otros
los moribundos celestes no encajan en la larga
lista de la bioectomía y esperan turno desde
la madrugada no nos hemos portado muy bien
y estoy todavía demasiado dormido para sentirlo
y muy feliz como esta insolente y colosal cumbia.



Martín Zúñiga Chávez (Cusco, Perú, 1983)
Es poeta, editor, gestor cultural y catedrático. Acaba de publicar el libro de no-ficción No siga ese pájaro (Paracaídas, 2017). Es también autor de los libros Gavia (2009), Pequeño estudio sobre la muerte (2010), Cover (2011), entre otros títulos. Su obra ha recibido importantes premios en España, México y Perú. Es maestrista en Literatura en la especialidad de Análisis del Discurso por la Universidad Nacional de San Agustín. Coorganiza el Festival Internacional de Poesía de Arequipa y desde hace varios años gestiona el proyecto LAE:LEA capítulo Perú Urbanotopia.

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